Frenkie de Jong se encara con Laporta y con Xavi: el holandés, en el punto de mira, les pega un hachazo inesperado

No está de acuerdo con las palabras del presidente y el entrenador

De Jong se está convirtiendo en el nuevo problema para el Barcelona. Pero en esta ocasión no es Luuk, que parece haber pasado de no contar y buscarle una salida a ser un fijo en la plantilla. Esta vez se trata de Frenkie, el mediocentro llamado a liderar el juego del equipo azulgrana está siendo muy discutido por no rendir al nivel esperado. Y por si fuera poco, ha tenido lío con Laporta y Xavi que puede dinamitar todo en el vestuario culé.

La temporada pasada muy de los mejores de la plantilla. Uno de los pocos que dio la cara, en un año muy gris donde parece que la Copa del Rey enmascaró las vergüenzas de un equipo que había caído en octavos de Champions dando una pobre imagen. Lo mismo que en Liga, donde pasaron de ser los favoritos, a desfondarse y no pelear por el título en las últimas jornadas. Pero como decimos, el holandés sí que demostró su calidad.

Algo que no está ocurriendo este curso. Se ha contagiado del juego apático de los culés hasta tal punto que está en el punto de mira. Son muchos los que piensan que no debería ser titular, para dejar su sitio a un centro del campo formado por Nico, Gavi y Pedri. Eso ha hecho que lo pongan en el mercado, y quieran escuchar ofertas por él. De hecho, sonó con fuerza para reforzar al Bayern, pero los alemanes han desmentido esa información.

Lo que sí está comprobado es que De Jong estalló contra Laporta y Xavi. El centrocampista les ha pegado un hachazo que nadie esperaba, pero ha dejado claro cual es su postura ante los hechos de los últimos días. Y es que ya ha demostrado su carácter ganador. Frente al Alavés salvó a los suyos con un gol en los últimos minutos del partido, cuando se abalanzaban de cabeza al empate a 0. En el momento en el que está más discutido, fue el salvador y libró al Barcelona de un momento delicado.

Pero al acabar el partido, se puso delante de los micrófonos para hablar a pie de campo, y dejó un dardo que se repitió de manera interna. Y es que dejó claro su parecer cuando dijo que “me da pena decir que estamos orgullosos cuando perdimos con el Madrid porque en el Barça cuando pierdes, tienes que estar decepcionado". Un discurso totalmente opuesto al que se había mostrado desde la Ciudad Condal, donde se consideraban los vencedores morales.

Y no fue un comentario aislado, ya que dentro del vestuario, ya ha habido momentos de tensión ya que Frenkie está rebotado contra el discurso marcado por la entidad de orgullo por perder. Considera que es un pensamiento de equipo pequeño que no se lo pueden permitir.

Eso ya ha provocado el choque con Laporta, que hay que recordar su vídeo con un discurso alentando a los suyos en los mismos vestuarios nada más perder en Arabia contra el Madrid, donde parecían que había ganado, hablando de orgullo. Misma línea de Xavi y todo el barcelonismo, que parecen contentarse con la mejoría en el juego, aunque los resultados no lleguen.