Jordi Alba se rebela ante el último motín que ha formado dentro del vestuario del Barça

El lateral está siendo uno de los jugadores más criticados

No parece mejorar la situación en Barcelona. Si tras perder frente al Madrid en la Supercopa de España, habían intentado vender una mejoría, y una imagen mucho más positiva, poco les ha durado. Perdieron en Copa ante el Athletic, y frente al Alavés, sufrieron para conseguir los 3 puntos. Tras esos dos entuertos, especialmente señalado salía Jordi Alba, que se ha revelado en medio del motín que ha formado en el vestuario.

Frente a los bilbaínos tenía la misión de parar a Nico Williams. Había dudas de cómo iba a aguantar con un jugador tan rápido y explosivo según fuesen pasando los minutos y las piernas del culé fueran estando cansadas. Pero es que no fue capaz de frenarle ni en el primer minuto de juego. Y es que no tardó nada en dejarle retratado, antes de irse de él y servirle a Muniain la asistencia en el primer gol.

Pero es que tuvo un partido gris, superado en cada lance, y sin duda fue uno de los que salió peor parados de la eliminación copera. Ante el Alavés, tenía la oportunidad de resarcirse. Debía demostrar que lo de Nico fue sólo una mala noche, pero Jason, un perfil de jugador diferente, sin ser tan veloz, también volvió a dejarlo en evidencia. Cada vez son más lo que piensan que Jordi Alba no tiene el nivel para jugar en el Barcelona y que apuestan por acudir al mercado de fichajes.

Sin embargo, el lateral culé ha querido rebelarse ante todos los comentarios que ha recibido en las últimas semanas. A pesar que cada vez más seguidores azulgranas empiezan a dudar que sea un jugador capaz de aguantar el ritmo de todos los partidos, él no parece verlo así. Sigue concentrado en el equipo, sin la intención de marcharse, como ha dejado entrever con sus últimas declaraciones. Aunque habría que ver si el resto de culés opinan igual.

Alba, tras el partido frente al Alavés, no dudó en preguntarse "¿si son injustas las críticas? ni me preocupa. Tengo el respeto de mis compañeros y de mi cuerpo técnico. jugar 10 años en el Barça nadie me lo ha regalado". Parece que no le importa mucho lo que digan sus propios aficionados. Y es que hay que tener en cuenta que muchos de los que se han mostrado contrarios a que siga siendo titular, son seguidores del Barcelona.

Hay quien piensa que el lateral lleva evidenciando un bajón físico y de rendimiento desde hace ya varias temporadas. El propio Luis Enrique estuvo durante varias convocatorias de la selección española sin llevarlo, ya que hay otros laterales que están mucho mejor que él, y que se han merecido el puesto, un síntoma inequívoco de que el jugador está llegando al tramo final de su carrera.

Pero la puntilla le llegó con la marcha de Messi. El argentino había sido su gran apoyo dentro del vestuario, salvándole en más de una ocasión cuando era cuestionado. Además se entendían sobre el terreno de juego lo que sacaba el mejor rendimiento del lateral. Sin él, estamos viendo la peor versión del jugador y no parece que vaya a hacer autocrítica.