La verdad de la pelea entre Pedrerol y Siro López, ¿por qué no se soportan?

Ambos protagonistas han hablado

Seguramente sea uno de los enfrentamientos más famosos que se recuerdan de los últimos años. 2 periodistas que compartían pantalla, y que terminaron separando sus caminos de mala manera, aunque no se ha dicho exactamente qué ocurrió entre ellos 2.

Cada uno ha hecho el camino por su lado, y no se puede decir que les vaya mal. Pedrerol sigue al pie del Chiringuito, el programa líder del sector y que ha ido dejando tirados a otros espacios que intentaron tener una fórmula similar, pero que nunca terminaron de tener éxito. Por su parte, Siro López ha demostrado su capacidad de adaptación a las nuevas tendencias. Con su canal de Twitch es todo un referente, además de seguir colaborando en un sinfín de medios, lo que demuestra el gran momento que atraviesa en su carrera.

Pero, volviendo a la pregunta de qué ocurrió entre ellos, fue Ibai Llanos el que quiso interesarse por ellos. Le preguntó a Pedrerol y por su parte parece que no hay problema: “Él me dijo que iba a hacer reportajes en Mediaset. Y hablamos de eso y le dije, ‘no me fastidies, Siro, busquemos soluciones para que te quedes’. Y me dijo: ‘no, no, no, no quiero que me convenzáis, tengo claro que me quiero ir’. Él se sintió engañado o no, son cosas que…”.

La versión de Siro es diferente, y es que le quiso responder diciendo: “Mira que lo tenía fácil. No sé cuántos de los que estáis viéndome, cuántos visteis mi trayectoria en Mediaset y en El Tiki-Taka. Si alguno de vosotros me saca un sólo reportaje que yo haya hecho en Mediaset, voy de rodillas a pedirle perdón a Pedrerol y le regalo lo poco que pueda tener en propiedad”.

Y ha querido contar su visión de lo que ocurrió: “¿Qué me estás diciendo, que yo no fui solidario? ¿Que soy un pesetero? ¿Eso es lo que quieres insinuar? Primero, yo no me fui por un problema de dinero, me fui por un problema de dignidad, porque este señor, en Navidad, un 23 de diciembre, sin yo pedirle nada, me dice que voy a ganar una cantidad. Sobre el 15 o 16 de enero se desdice y dice que voy a cobrar otra. Y cuando llega el 30 de enero, que he trabajado todo ese mes, me dice que tenemos que volver a hablar porque no me puede pagar lo que me había prometido. Supongo que pensando que yo no tengo donde caerme muerto y que me voy a tener que joder con lo que él me diera. No me fui antes precisamente por solidaridad, porque las estábamos pasando putas y decidí continuar y eso sí fue solidaridad. Entonces, ¿qué cojones me estás contando, chaval?”