Se lo dice a la cara a Xavi: o le pagan o no se va del Barça

Otro problema más con el que no contaban

El Barcelona cada vez tiene más complicado el acudir al mercado estival para reforzar una plantilla que necesita cambios urgentes, como ha evidenciado este curso, en el que han sido eliminados de todas las competiciones que han disputado, sin tener la más mínima opción de conquistar algún título. Por eso soñaban con que este verano pudieran solucionar todo a base de traer nuevos jugadores.

Pero para ello se están encontrando con diferentes problemas que amenazan con dinamitar todo. En primer lugar el económico. No tienen dinero suficiente, arrastrando una deuda millonaria, y también con un límite salarial disparado, que les impide inscribir jugadores de momento, como evidencia el hecho de que no hayan anunciado oficialmente a Christensen y a Kessié. Por lo que así es difícil acudir al mercado.

Y más cuando varios jugadores de los que tienen apuntados en la lista negra para que se marchen, ya han mostrado su intención de quedarse, metiendo en un serio problema a la directiva. Por un lado ya hemos hablado de Umtiti, que la tetrápoda pasada mostró su idea de cumplir el contrato, y tras renovarlo en el mes de enero, para poder inscribir a Ferran Torres, parece que este año va a seguir por el mismo camino.

Una situación muy parecida viven con Braithwaite, que ya ha confirmado al club que, o le dan la carta de rescisión, o él quiere cumplir su contrato con el Barcelona. Pero si no tenían suficientes problemas ya con ellos, el último en mostrar sus reticencias para abandonarla el conjunto azulgrana es el portero, Neto. El brasileño se lo ha dicho a la cara, ya sabe que no cuentan con él y que quieren venderlos, pero o le pagan o no tiene intención de marcharse.

El pasado mes de enero, consciente de que no iba a jugar a pesar de las malas y criticadas actuaciones de Ter Stegen, subió a los despachos para pedir que le dejaran marchar. Tenía varias ofertas encima de la mesa y su intención era poder tener minutos en otro club, pero se encontró con la puerta cerrada después de que se marchará cedido Iñaki Peña, ya que no querían quedarse sólo con el cancerbero alemán y el del filial.

Por eso, tras verse retenido, este verano lo tienen claro. Con un año de contrato todavía por delante, no se va a marchar tan fácilmente. Quiere cumplirlo y la única forma que contempla para marcharse, es que le den la carta de libertad, y por lo tanto que le paguen el salario de un año para que además así no les compute en el límite salarial. Si en Barcelona se quieren librar de él para ahorrarse dinero, primero deberán pagar.

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Como decimos, el propio jugador es quien se lo ha comunicado a Xavi, que sabe que se le siguen acumulando los problemas para planificar la próxima temporada. Tiene por delante unas semanas importantes y que pueden ser decisivas, porque pueden marcar si conseguirán incorporar a más jugadores o se tendrán que contentar con Kessié y Christensen.